Soy bastante específico con las series de televisión que me gustan, entre otras cosas porque no tengo paciencia para estar pendiente de los horarios ni soporto tragarme los anuncios o la pobre calidad de señal que ofrecen las cadenas. Normalmente sólo veo las series que ya están editadas en DVD cuando tengo referencias de que son muy buenas. Este es el caso de Prison Break.
La encontré muy bien puntuada en FilmAffinity y me planteé verla. En primer lugar, deciros que merece la pena conseguirla en alta definición. Si la ves en una pantalla de 2.5 m usando un proyector, se te caerá la baba. Varía sustancialmente a verla en una televisión a baja resolución.
La primera temporada transcurre casi por completo en una prisión, y narra detalle a detalle la historia de una fuga. Lincoln Burrows es condenado a muerte, y su hermano Michael (el protagonista) roba un banco para ingresar en la misma prisión, habiendo elaborado antes todo un complejo plan para lograr la fuga de ambos. Capítulo a capítulo vamos asistiendo a todas las dificultades que se le van poniendo por delante a Michael Scofield (personaje interpretado por (Wentworth Miller) y el grupo de presos.
Lo primero que me llamó la atención de esta serie es su excelente ambientación. Ese plano sobrevolando la prisión quedará en las retinas de todos los que hayan visto la serie. El interior de la prisión también está perfectamente recreado. Las actuaciones son excelentes en casi todos los casos, con una gran selección de casting.
Está dirigida con maestría y los guiones van resolviendo todos los detalles poco a poco. Quizás la única pega está en la poca credibilidad de ciertas situaciones, pero realmente no es algo que te plantees cuando la estás viendo, porque el suspense es tal que sólo deseas conocer lo que va a suceder a continuación.
Es difícil que una serie enganche tanto como esta, y que no haya ningún capítulo que te aburra. Sólo he visto un capítulo algo más flojo que el resto, y es precisamente uno que no transcurría en la cárcel sino donde explicaban cómo acabó cada uno de los presos en prisión. Cada capítulo, de unos 40 minutos, se hace corto y te deja con ganas de más.
Si te gustan las películas de cárceles, esta serie es para ti. Y, si puedes, intenta verla en las mejores condiciones (pantalla grande y alta resolución), porque merece la pena.
